Popurrit El Porfiao – El Frutero
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Gaviota que vas volando con una pena en el alma llorando de sentimiento ayer te miré en la playa, yo estaba del otro lado cantando con mi guitarra y al mirarte así tan triste se me salieron las lágrimas al ver que ya ni tu sombra se deja ver en e……

Me siento triste por los caminos lejanos porque no veo las huellas de mi caballo, me sentí solo el día que se me murió porque en mi tierra era uno de los baqueanos. Chungo amarillo jovero aunque estás muerto, te mereces un regalo una estatua de…
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My boy lleva a la playa su steel band, lo hizo con dos barriles de gasoil. No más yo se lo pido él le da pam y por eso es que yo muero por my boy. Y la gente que escucha el repicar grita, desde la orilla: I like too y my friend le da vuelta a su …
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de dónde van, coming down de dónde van, coming down de dónde van, coming down verde way, verde palote. Ayayayayay Cecilia, Ayayayayay Cecilia, si llueve jue pumae, masin camapue. see what you do, pue saufer you put me under the bed and you made……

Hoy recuerdo La Zuliana, tiendas que en El Saladillo (viva la Flor de la Habana y su famoso cigarrillo) Vendieron los cigarrillos de aquella Flor de la Habana. Vamos a fumar La Flor de la Habana Que es la soberana Marquilla sin par Y la Gran …
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Me desperté pensando en tí, al fin pude soñar que éramos felices, te imaginé y hasta soñé lo bello que ha sido vivir lo compartido de un amor querido. Me desperté pensando en tí, al fin pude soñar que éramos felices, te imaginé y hasta soñé …
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El cambalache que tú y yo hicimos un día, que por siempre duraría, según juramento fiel, no lo has cumplido y se está desvaneciendo, Y yo creo por lo que estoy viendo, que se quedó en el papel. Que nos daríamos con pasión y con fervor, el más g……

En el rio Yurubi, soñé una mañana al lado de una hermosa mujer yaracuyana Me sentí tan feliz, que mi amor le entregué a esa mujer tan linda nunca la olvidaré. En el rio Yurubi, soñé una mañana al lado de una hermosa mujer yaracuyana me sentí tan ……

Manuelita vivía en Pehuajó pero un día se marchó. Nadie supo bien por qué a París ella se fue, un poquito caminando y otro poquitito a pie. Manuelita una vez se enamoró de un tortugo que pasó. Dijo: «¿Qué podré yo hacer? Vieja no me va…
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